Hay historias que no solo se leen, se viven; historias que huelen a polvo, hierro y sangre, que resuenan con el eco de los tambores de guerra y el susurro de los dioses. La trilogía de Escipión, escrita por Santiago Posteguillo, logra eso y más al narrar la epopeya de Publio Cornelio Escipión, el hombre que desafió al invencible Aníbal y cambió para siempre el destino de Roma.
A lo largo de tres novelas —Africanus, el hijo del cónsul, Las legiones malditas y La traición de Roma—, el autor nos conduce por las luces y sombras de una civilización que forjó el mundo antiguo con ambición, estrategia y gloria. En sus páginas laten la humanidad de los héroes, la grandeza de las batallas y la fragilidad del poder.
Esta trilogía histórica no sólo revive la historia: la convierte en una experiencia vibrante. Es un viaje a los días en que Roma aún no era imperio, pero ya soñaba con conquistar el mundo.
Africanus: el nacimiento del enemigo de Aníbal.
Siglo III a.C. Roma se halla sumida en una de las guerras más terribles de su historia. Frente a ella se alza un enemigo tan brillante como implacable: Aníbal Barca, el genio de Cartago, maestro de la estrategia y terror de las legiones. Con su ejército, atraviesa montañas, valles y desiertos, derrotando a cónsules y ejércitos romanos en una marcha que parece incontenible.
En medio de aquel caos, surge un joven destinado a cambiar el curso del mundo: Publio Cornelio Escipión, nacido en el seno de una familia de cónsules, forjado por la tragedia y la guerra. A pesar de su juventud, el fuego de Roma arde en su interior, y su ingenio y valor lo conducirán a desafiar al más temido de los enemigos.
Con una prosa vibrante y un rigor histórico admirable, Santiago Posteguillo nos transporta al corazón de la República romana, donde se entretejen la gloria, la ambición y la esperanza. Africanus no solo narra el nacimiento de un héroe: celebra la fuerza del espíritu humano ante el destino y nos recuerda que incluso en la guerra más oscura puede surgir la luz de la grandeza.
Las legiones malditas: el desafío final a Aníbal.
Aníbal ha hecho temblar los cimientos de Roma. Desde Hispania hasta Italia, su genio militar ha derrotado a cónsules y legiones, extendiendo el miedo hasta las puertas de la capital. Mientras asedia las regiones cercanas a Roma y aguarda la llegada de sus hermanos desde el norte para dar el golpe final, un hombre decide desafiar lo imposible: Publio Cornelio Escipión.
Con apenas dos legiones y escasos recursos, Escipión toma una decisión audaz: llevar la guerra al corazón de Cartago. Cruza el mar hacia África, tierra hostil y desconocida, decidido a cortar las raíces mismas del poder enemigo. Allí, en las llanuras ardientes, el destino reunirá a los dos mayores estrategas de la Antigüedad en un duelo que marcará el rumbo de la historia.
Mientras tanto, Roma se desangra en luchas internas: el Senado dividido, las provincias amenazadas, las legiones dispersas. Escipión deberá reunir a todos los hombres posibles, incluso a aquellos que el honor había condenado al olvido: las legiones malditas. Con ellas, forjará una fuerza desesperada y gloriosa, capaz de enfrentarse al genio de Aníbal y al destino de una civilización entera.Santiago Posteguillo, con su maestría habitual, nos entrega una novela vibrante donde la épica y la humanidad se entrelazan. Las legiones malditas es una historia de redención, coraje y fe en lo imposible: el latido inmortal de Roma en su hora más oscura.
La traición de Roma: poder, intrigas y caída.
Tras la derrota de Aníbal en Zama, Cartago se repliega, humillada y obligada a pagar el alto precio de su osadía. Roma, vencedora, se enfrenta ahora a un enemigo más sutil: la inestabilidad interna. Mientras intenta mantener el control sobre las turbulentas tribus de Hispania, en el Senado se libra otra guerra —más silenciosa, pero igual de despiadada— entre los partidarios de Marco Porcio Catón, heredero del rigor de Fabio Máximo, y los de la poderosa casa de los Escipiones y los Emilio Paulo.
Pero el horizonte se oscurece de nuevo. Desde el lejano oriente se alza la sombra de un nuevo imperio: el del rey Antíoco III, el Basileus Megas, que gobierna desde los confines de la India hasta Asia Menor. A su lado, el genio militar de Aníbal Barca resurge, ahora al servicio del ejército seléucida. Frente a ellos, Roma convoca a Lucio Cornelio Escipión, hermano de Publio, para que, junto a él, encabece una última y desesperada defensa.Posteguillo nos sumerge en un torbellino de estrategias, traiciones y pasiones donde se entrelazan la gloria y la ruina. La traición de Roma es el ocaso de dos titanes, pero también el retrato inmortal de un mundo que aún sigue resonando en nuestra memoria: el del honor, la ambición y la eterna lucha por el poder.
“La vida es misteriosa, los dioses caprichosos y nosotros inconstantes.”
– Santiago Posteguillo, La traición de Roma.
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